Uno de los mayores deseos de quienes migran a Estados Unidos es poder reunirse con su familia. Emigrar solo puede ser un paso necesario para establecerse y comenzar una nueva vida, pero el anhelo de reencontrarse con los seres queridos es una motivación constante para millones de personas en todo el mundo. Afortunadamente, el sistema migratorio de EE. UU. ofrece mecanismos legales para que los ciudadanos y residentes permanentes puedan solicitar la reunificación familiar.
Este artículo está diseñado para ofrecerte una guía clara, actualizada y paso a paso sobre lo que debes hacer si deseas llevar contigo a tu familia a Estados Unidos. Conocer los requisitos, los tipos de familiares elegibles y los procedimientos legales te permitirá planificar con seguridad y evitar contratiempos.
¿Es posible llevar a la familia a Estados Unidos legalmente?
Sí, Estados Unidos permite a ciudadanos y residentes permanentes legales (portadores de la “Green Card”) solicitar que ciertos miembros de su familia puedan emigrar y vivir legalmente en el país. Este proceso se conoce como petición de reunificación familiar y está regulado por el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).
El sistema de inmigración familiar se basa en dos factores principales: el estatus migratorio del solicitante (ciudadano o residente permanente) y el tipo de relación con el familiar al que desea traer. La ley da prioridad a los vínculos familiares más cercanos, como cónyuges, hijos menores y padres.
¿Quién puede solicitar la reunificación familiar?
Los ciudadanos estadounidenses tienen más opciones para solicitar la residencia legal de sus familiares. Pueden pedir a su cónyuge, hijos (menores o adultos, solteros o casados), padres e incluso hermanos. Por otro lado, los residentes permanentes pueden solicitar únicamente a su cónyuge e hijos solteros. No pueden solicitar directamente a sus padres o hermanos.
Es importante tener claro el tipo de familiar que deseas llevar contigo, ya que esto determinará el proceso a seguir, los tiempos de espera y los documentos requeridos.
Requisitos para solicitar a un familiar
El proceso comienza con la presentación del Formulario I-130, conocido como Petición de Familiar Extranjero. Este documento establece oficialmente la relación familiar entre el solicitante (quien ya vive legalmente en EE. UU.) y la persona que desea traer.
Además del formulario, se deben presentar documentos que comprueben el parentesco, como certificados de nacimiento, matrimonio o adopción, según sea el caso. También se necesita una copia del estatus migratorio del solicitante, ya sea pasaporte estadounidense, acta de naturalización o tarjeta de residencia.
Otro requisito fundamental es demostrar que el solicitante tiene la capacidad económica para mantener a su familiar en Estados Unidos. Esto se hace a través del Formulario I-864, Declaración Jurada de Patrocinio Económico, en el que se demuestra que el patrocinador tiene ingresos estables por encima del nivel de pobreza establecido.
¿Qué familiares pueden obtener una visa más rápido?
Los familiares inmediatos de ciudadanos estadounidenses —es decir, cónyuges, hijos menores de 21 años y padres— no están sujetos a límites anuales de visas. Esto significa que el proceso suele ser más ágil y directo. En cambio, otros familiares, como hermanos o hijos mayores de 21 años, deben esperar en función de las cuotas anuales disponibles, lo cual puede demorar varios años.
Los residentes permanentes también enfrentan tiempos de espera más prolongados, especialmente si solicitan a hijos adultos. Por ello, muchos inmigrantes deciden esperar a obtener la ciudadanía antes de iniciar el proceso de reunificación con ciertos miembros de su familia.
¿Qué sucede después de presentar la solicitud?
Una vez enviada la petición familiar al USCIS, la solicitud será evaluada. Si se aprueba, el expediente pasa al Centro Nacional de Visas, que es la oficina encargada de coordinar el proceso consular. Allí se asignará un número de caso y se iniciarán los trámites para la entrevista en la embajada o consulado del país donde reside el familiar.
Durante este proceso, el familiar deberá presentar documentación adicional, someterse a exámenes médicos y asistir a una entrevista con un oficial consular. Si todo está en orden, se otorgará una visa de inmigrante, que permite ingresar a Estados Unidos y, posteriormente, recibir la residencia permanente.
En algunos casos, si el familiar ya se encuentra dentro de Estados Unidos con un estatus legal, puede optar por hacer un ajuste de estatus directamente sin necesidad de salir del país.
¿Cuánto tiempo tarda el proceso?
El tiempo de espera varía según la relación familiar y el estatus del solicitante. Para cónyuges, hijos menores o padres de ciudadanos estadounidenses, el proceso puede tomar entre 12 y 18 meses. Para otras categorías familiares, como hermanos o hijos adultos, la espera puede extenderse de 5 a 15 años, dependiendo de la demanda y del país de origen del familiar.
Es importante mantenerse informado sobre los boletines de visas publicados mensualmente por el Departamento de Estado, ya que indican qué solicitudes están siendo procesadas y cuáles avanzan en la fila de espera.
¿Qué pasa si mi familiar no tiene documentos?
Si el familiar que deseas traer se encuentra en situación migratoria irregular, el proceso puede volverse más complejo. En algunos casos, se debe solicitar un perdón migratorio, conocido como “waiver”, para que pueda regularizar su estatus. Estos procesos son delicados y requieren asesoría legal especializada.
Es fundamental evitar soluciones rápidas o promesas de terceros que ofrezcan visados o entradas irregulares. Cualquier intento de fraude puede bloquear futuras solicitudes o poner en riesgo la posibilidad de regularizar la situación migratoria.
Recomendaciones finales para llevar a tu familia contigo
Antes de iniciar el proceso, infórmate con fuentes oficiales como USCIS o el Departamento de Estado. Asegúrate de tener en regla tu estatus migratorio y la documentación que respalde tu solicitud. Consulta con un abogado de inmigración si tienes dudas sobre tu elegibilidad o la de tus familiares.
La reunificación familiar es un derecho que muchos migrantes pueden ejercer, pero requiere paciencia, constancia y cumplimiento de las normas legales. Cada caso es distinto, por lo que es importante no compararse con otras experiencias y seguir el proceso con responsabilidad.
Conclusión
Llevar a tu familia contigo a Estados Unidos es un sueño alcanzable si se siguen los procedimientos legales y se cumple con los requisitos establecidos. Aunque el proceso puede ser largo en algunos casos, el resultado vale la pena: reencontrarte con tus seres queridos y construir juntos una vida en un país que ofrece múltiples oportunidades.
Planificar con tiempo, reunir la documentación correcta y mantenerse informado es la mejor forma de lograr una reunificación familiar segura, legal y exitosa. Si estás listo para dar este paso, recuerda que no estás solo. Existen recursos, organizaciones y profesionales que pueden ayudarte en cada etapa del camino hacia el reencuentro familiar.